Fuga de cerebros

Hasta hace unos días atrás uno podía leer en los medios de comunicación que la situación económica de Argentina mejoraba: pagamos una parte importante de la deuda externa, el índice de desempleo había bajado; en Córdoba los call centers se convirtieron en una esperanza para muchos estudiantes, subían los niveles de recaudación de los impuestos, etc. etc.

Sin embargo, los números que pretenden representar la realidad ni siquiera rozan la experiencia cotidiana de la gente, pareciera como si hablaran de otro país. Muchos son los que ven cómo se licúan los sueldos con la inflación encubierta que padecemos, o que el puesto de trabajo al que se accede es en realidad un paliativo porque se trata de empleos en negro, y no pocos son los estudiantes y profesionales que se van en busca de aliento hacia otros destinos.

Así es como muchos cordobeses se llevan un pedazo de los que quedan, que son quienes deciden seguir buscando el país soñado: El de la estabilidad laboral, del crecimiento personal y la movilidad social. Y es ante esta cruda realidad que muchos ciudadanos hacen la otra lectura de los anuncios políticos; el contraste del día a día con lo que se intenta reflejar y con lo que se vive.

¿Cómo hacer para proyectar un futuro mejor?, ¿Cómo volver a creer en un país mejor y reestablecer la confianza en nuestros políticos?, ¿Quién tiene la respuesta a nuestros problemas cuando la sensación sigue siendo la de ser una ciudadanía desamparada?

En estos casos, la realidad nos toca muy de cerca, nos supera, y hace expresar lo que se vivencia, es cuando se necesita dejar el halo sacral de la profesión periodística de lado y opinar desde la misma piel con la que se sienten las cosas.
La propuesta es recrear otra Argentina, la que se construye día a día, desde los pequeños valores, desde un nivel simbólico. Cuando encuentres una buena noticia de aquellas que te hacen pensar que otro país es posible plasmala en este recopilado de ventanas para demostrarles a todos aquellos que están desilusionados que nuestra situación puede cambiar si se tiene algo por qué apostar.

• Subí tu buena noticia que encuentres en los medios y tu comentario.